Déjate raptar por Desperados

Marina Miján

Jauja, eso es lo que parecía el pasado jueves, 22 de mayo, la fiesta de Desperados, «la fiesta del año», según los asistentes. Desde luego, no era para menos. Cuidando cualquier detalle, la marca de cerveza, parte de la multinacional Heineken, consiguió superar las expectativas de los asistentes imponiéndose como uno de los eventos a los que cualquier fiestero querría acudir.

Desde el más estricto misterio, el #RaptoDesperados logró su objetivo principal: «raptar» a todos los afortunados que consiguieron meterse en las listas de invitados, quienes, completamente desinformados sobre el lugar o lo que iba a suceder en las próximas horas, acudían puntuales a su cita.

El rapto empezó a las 20:30 horas en la estación de Méndez Álvaro donde varios autobuses cargados de buen rollo y animación llevaron a los elegidos al lugar donde tendría lugar la fiesta, unos contenedores industriales establecidos a sólo 15 minutos de la estación. El resto, si nunca habéis estado en una fiesta de este tipo, parece cuento.

Pulseras fluorescentes, tickets con valor de dos cervezas y un perrito caliente por cada asistente daban paso a una fiesta que ni los famososos quisieron perderse, o si no que se lo pregunten a Porta, Daniela Blume o Uri Sabat entre otros. Sin embargo, el material no acababa ahí. Los integrantes de la fiesta tenían la oportunidad de ir consiguiendo más cervezas a medida que fueran superando cada una de las seis pruebas que formaban el evento y que estaban colocadas alrededor de la poco definida pista de baile. Por cada prueba superada, otra Desperados. El método era sencillo, aunque, para opinión de algunos presentes, «para superar esas pruebas había que estar tocado».

Comer bichos, beber tabasco, ponerse en manos de un «barbero loco», hacerse un piercing o un tatuaje y bailar con una gogó en una jaula era lo que se pedía para hacerse con una cerveza más. Además, si se llegaba a los 500 tuits incluyendo el hashtag #RaptoDesperados1 durante un minuto habría barra libre. Lo mismo, sólo que de mayor duración, al llegar a las mil menciones. Por susupuesto todo el mundo se lo tomó muy en serio llegando a hacer del hashtag TT mundial y estableciendo colas de más de 40 minutos para acceder a según qué pruebas.

Se puede asegurar que todo el mundo lo pasó en grande, aunque los detalles y las imágenes nos las reservamos, porque lo que pasa en un Rapto Desperados… se queda en el Rapto Desperados.